
Un ángel me ha querido
De una forma que nadie me quiso.
Con su halo cegador
Mi vida iluminó,
Vi más de lo que quise ver
Y de lo que ella me quiso enseñar
Nada supe aprender.
Su voz era de amor y de cambio,
Pero su luz deslumbraba tanto
Que olvidé el receloso filtro de mi mirada.
Le dije: «mi voz es de rabia,
y nuestro futuro maldito está
por no ser capaces de cambiar.»
Un ángel me quiso una vez,
Yo la alejé de mí,
Ella se acercaba a sí,
y ahora se ha ido para mí.
Dentro de mí: la llama de su paso,
Y el anhelo de su vuelo.
Yo una vez quise a un ángel
Mas me faltaba amor propio
Y me guardaba muchos odios.
Ahora sólo quiero ver
Sus alas volar,
Y al ángel otra vez sonreír,
Él la que me hizo tan feliz.
Buscaré entre sus recuerdos la felicidad ahora inalcanzable que atrapé cuando tuve la suerte de tocar su alma.
Su alma tan mansa con la mía tan sucia.
Todo a cambio de nada.